Llevamos días freneticos viendo tres o cuatro películas por día y casi no da tiempo ni a escribir en el blog. Hoy quiero remarcar las películas que más me han gustado en estos días. Una de ellas es de la sección Perlas y la otra de la Sección Oficial.
Soshite chichi ni naru / Like father, Like son
Presentada en la sección Perlas y ganadora del Premio del Jurado en el Festival de Cannes, la última película de Hirozaku Kore-eda nos ha robado el corazón. Hace unos años pudimos ver en el Festival ‘Kiseki’ una película sobrecogedora relacionada con la infancia, aunque de otro modo diferente a esta.
Esta película nos acerca a una decisión traumatica para dos familias. El saber que sus hijos fueron intercambiados al nacer destroza a ambas familias y el honor de los padres. Se me hace duro decirlo, a la vez que se me hizo verlo, pero la mujer en esta decisión no importa, incluso casi se le culpa del problema porque al nacer su hijo no se dieron cuenta de que no era el suyo.
Llevo tiempo viendo películas en las que se refleja la frialdad asiatica, pero aun me cuesta entender este tipo de comportamiento en un matrimonio. En toda la película no se rozan, no hay afecto, solo compañia. Las dos horas que dura la película estuve en constante agonia por lo que pasaba, aguantando las lagrimas para no llorar y para que la decisión no doliese a los niños. Es la película que más me ha gustado y la que mejor he votado con un 9 en la revista cultural Zart.
Quay d’Orsay
Volviendo a la Sección Oficial, una de mis favoritas sin duda es ‘Quay d’Orsay’, una sátira política en la que se retrata al ministro de Asuntos Exteriores de Francia. Tenía ganas de verla, ya que pintaba al estílo de la película de Costa Gavras, ‘Le capital’, pero con todo el respeto a Gavras, me quedo con la película de Bertrand Tavernier.
El ministro Alexandre Taillard necesita un ayudante para su discurso, al que le dará el apartado de lenguaje. Arthur se volverá loco escribiendo y reescribiendo el discurso de 10 minutos que tendrá que dar el ministro en el Consejo de Seguridad de la ONU. Para ello Arthur se tendrá que poner en contacto con todos los consejeros que tiene el ministro, cada uno le dirá lo que le interesa que aparezca en su discurso, lo que nunca coincide con las preferencias del ministro.
La película es perfecta, sobre todo en guión. Basada en el comic homónimo de Lanzac & Blain, esta película brilla por el juego que hace con las palabras y el discurso. Uno de los momentos que más me gusto y divirtió es cuando el ministro le dice a Arthur que se apoye en las frases de Heraclito (las cuales salen durante toda la película). En ese momento Arthur está con Claude, el consejero de Europa. Arthur no sabe muy bien como abordar la crisis de la anchoa con España, entonces cogen el libro de Heraclito, leen una frase y meten la anchoa donde pueden. Claude y Arthur no pueden parar de reir y al público nos pasó lo mismo.
De momento es mi candidata favorita para la Concha de Oro, pero aun nos quedan unas cuantas películas por ver y tal vez tengamos alguna grata sorpresa….